La varita mágica | Títeres

Vuelven los títeres a Casa de México en España y en esta ocasión nos proponen un viaje por la historia y la magia.

En esta historia Shubá, un niño zapoteca de Oaxaca (México), presenta un cuento popular de su tierra, en el que el principal elemento es la magia: el Coyote quiere comerse a Doña Coneja, a quien engaña para que se pierda en el bosque. Don Armadillo intentará rescatarla, y haciendo uso de una varita que recoge en la vereda, que él llama “varita mágica”, nos enseñará los secretos de la verdadera magia y dará una lección al feroz Coyote.

“La varita mágica” es una adaptación titiritera de Jesús Sánchez, de la Compañía de Títeres La Matatena, en la que se utilizan las técnicas de títere de guante, bocón y marote, acompañada de música tradicional mexicana, con una duración de 50 minutos. Este montaje es recomendable para toda la familia.

Objetivos

El cuento “La varita mágica” tiene como premisa que “la verdadera magia va acompañada de las buenas acciones” e invita a las niñas y a los niños a aprender, a compartir y a cuidar de sus amigos.

Impartido por Títeres la Matatena

Sobre la cultura zapoteca 

La cultura zapoteca es una de las más antiguas e importantes de Mesoamérica, y fue icono de la expresión artística de los pueblos de la región durante la época precolombina (entre los años 500 a. C. y 900 d. C.)

Ocupaba el territorio del actual valle de Oaxaca y el istmo de Tehuantepec. Sus integrantes creían que procedían del cielo y se llamaban a sí mismos binni záa, que significa “la gente de las nubes”, apodo que hacía referencia, además, a su asentamiento en tierras montañosas altas.

Los cuentos populares tienden a reflejar situaciones sociales y presentan temas fantásticos, al alcance de la aventura y el ingenio. La mayoría de las veces son protagonizados por personajes que podrían considerarse presas fáciles, animalitos que en todas sus aventuras alcanzan lo que se proponen poniendo en práctica su ingenio y su astucia. De esta manera, sus mejores hazañas y peores mañas encuentran su máxima expresión cuando se enfrentan al Coyote, quien a pesar de su ferocidad y temeridad es burlado por los indefensos una y otra vez.